Mil gritos tiene la noche (Pieces)

Después de una pequeña crisis de identidad bloggera, intentando una cosa que me daba hasta pereza y ralentizando la buena marcha que empezaba a coger el blog, he decidido dejar de ponerme palos en mis propias ruedas y volver a lo que se me da bien a lo que me gusta: el cine cutre italiano y apañó.
Y madre mía, maaadre míiiia lo que traigo hoy: un clasicazo, una peli que tenía muchísimas ganas de ver y que no me ha defraudado, la obra magna de uno de los pilares del cine cutre español, Juan Piquer Simón: Mil gritos tiene la noche.
La película empieza en Boston, en 1942. Un "inocente" niño juega en su habitación, cuando su madre aparece. Poco a poco, se acerca a él y ve que esta haciendo un puzzle porno. La madre enloquece, le da un par de toñinas al niño y comienza como una histérica a buscar todo el porno de la habitación, mientras culpa a su padre, un héroe de guerra. El niño, como todo hombre cuando ve amenazado su porno, saca un hacha y se carga a la madre. 2 minutos de peli. TO-MA YA. La peli empieza altísima y, os aseguro, no baja en un sólo momento. Además, estos dos minutos son un rico resumen de lo que veremos: tetas y sangre. Ir con cuidado, porque el stendhalazo es más que probable.

Pasan 40 años y vemos unos manos enguantadas que sacan de una caja el vestido, los zapatos de la madre muerta y el puzzle porno, mientras vemos un accidente en el campus universitario en el que muere una chica. Y parece que no, pero este detalle es importante, porque es el que le devuelve al asesino sus traumas y le hace volver a matar. Pero, un momento, esto me suena: guantes, un asesino que mata por un trauma infantil, muertes muy violentas, planos subjetivos del asesino... SÍ, la película es un giallo (¡con guión de Joe D'Amato, además!) que fusila de manera fina conceptos de Argento, sobre todo.

De vuelta al campus, una chica muy salada estudia en la hierba cuando un loco aparece con una motosierra y la decapita. Llega la policía a investigar y nos muestran a los principales personajes de la peli: el rector raruno; el profe de anatomía, raruno también (y con un bigote absurdo); los polis,con la profesionalidad en mis cojones; súper Kendall, el típico personaje protagonista de giallo que investiga con gran eficiencia pese a no ser poli; la mezcla entre Bud Spencer y Popeye que hace de jardinero y nuestro héroe, el amigo fantas.

Con este panorama, y con la normalidad aparentemente instaurada en el campus, otra chica limpita se va a tomar un baño a la piscina en topless (porque sí, las auténticas protagonistas de la peli son las teturras), cuando aparece el asesino y, en una escena completamente ridícula, la despieza con la motosierra. La poli vuelve y, una vez interrogados a los sospechosos, decide utilizar a Kendall para las investigaciones porque, bueno, porque es súper Kendall, Kendall el fucker. Para su ayuda cuenta, además, con una ex-tenista metida a poli (eing?) que se infiltrará haciendo de profe de tenis (eing?2).

La acción, sin embargo, nos devuelve al campus, donde una joven practica baile, mientras el asesino, enguantado, la espía. La joven huye, en una secuencia al más puro estilo Argento, hasta que llega a un ascensor y PAM, el asesino la descuartiza sin piedad con su sierra eléctrica. Kendall aparece, dirige a la poli y vuelve a echarle un polvo a una del campus. Sin embargo, oye un ruido raro y va a ver que pasa: La tenista-poli esta investigando, asustada porque oye ruidos y se hace la magia. LA MAGIA. Una secuencia que no viene a puto cuento de nada y que convierte esta peli en el mejor giallo de la historia. Os dejo unos minutos para que la veáis. Mi profesor de Kung Fu. Que poco pagados están estos momentos.

El asesino, sin embargo, sí que anda por ahí y, en una escena al más puro estilo Fulci, mata a una periodista que andaba por ahí, investigando. Probablemente le haya sabido a poco, porque la mañana siguiente mata a otra chica, en otra secuencia genial. Viendo que no avanzan una mierda en la investigación, Kendall decide ir a ayudar a la policía estudiando archivos antiguos y la poli-tenista va a interrogar al rector porque sospecha del profe gaylord. Kendall, súper Kendall, descubre que el rector es el niño y, por lo tanto, el asesino. Raudo y veloz va a casa del rector, que ha drogado a la tenista. Kendall forcejea con el rector, pero llega la policía y le pegan un balazo en la cabeza. El rector muere, Kendall vive y la tenista también. ¿Fin? NO, falta lo segundo mejor después de la escena de Kung Fu: Kendall se apoya en una pared y el cadáver de la madre se le cae encima. Él se asusta, la poli se asusta, todos nos asustamos. Parece que va a acabar y el cadáver de la madre se levanta y le agarra los huevazos de semi dios, destrozándolos. Ahora sí, fin.

En resumen, la película es un clásicazo de la serie B y con razón. Es muy entretenida, divertida por absurda y abundan la sangre. Muy, muy recomendable.